El cantante de 96 años que falleció ayer, vendió más de 50 millones de discos a lo largo de su carrera profesional
Tony Bennett, el último de una generación de cantantes estadunidenses cuyo espíritu alegre unió generaciones para convertirlo en un creador de éxitos durante siete décadas, murió ayer a los 96 años.
Criado cuando las grandes bandas definían la música pop estadunidense, Bennett logró una improbable resurrección cuando comenzó a ganarse al público joven en la década de 1990, sin necesidad de reinventarse.
Con más de 80 años se convirtió en la persona de mayor edad en alcanzar el número uno en la lista de ventas de álbumes en Estados Unidos gracias a una colección de duetos con Lady Gaga, quien se convirtió en su amiga y compañera de gira.
También se involucró en la causa contra el racismo en la década de 1960 y una hija de Martin Luther King Jr. lo recordó ayer.
«Gracias por tu compromiso con el amor, los derechos civiles y un mundo mejor”, tuiteó la hija de King, Bernice.
Comenzando con la grabación de la canción de la película Because of You en 1951, Bennett cantó docenas de éxitos, incluidos Rags to Riches, Stranger in Paradise y, en lo que se convertiría en su tema característico, I Left My Heart in San Francisco, que le valió dos de los 20 Grammy de su carrera.
Pero la invasión británica de Estados Unidos liderada por The Beatles pasó factura al cantante, cuya música comenzó a tornarse anticuada. Con el tiempo, su carrera revivió.
«Cuando apareció el rap, o la música disco, cualquiera fuera la nueva moda, no traté de encontrar algo que encajara con el estilo de la escena musical”, dijo Bennett a la revista británica Clash.
Simplemente me mantuve y canté con sinceridad y traté de ser honesto conmigo mismo, sin comprometerme nunca, simplemente haciendo las mejores canciones que pude pensar para el público”, dijo. “Y afortunadamente dio resultado”.
Uno de los detalles que más ha llamado la atención es que hasta un día antes de su fallecimiento el legendario intérprete se mantuvo tocando el piano. El jueves estuvo sentado frente a éste y dio voz a Because of You.
«Tony nos dejó hoy, pero todavía estaba cantando el otro día en su piano y su última canción fue Because of You, su primer éxito número uno. Tony, gracias a ti tenemos tus canciones en nuestro corazón para siempre”, se lee en su cuenta oficial de Twitter.
El cantante originario de Long Island, Nueva York, deleitó a generaciones de audiencias desde la década de los 50 con elegantes interpretaciones de canciones clásicas.
Bennett se enteró que padecía Alzheimer en 2016 y fue su esposa Susan la encargada de darlo a conocer a través de una entrevista con la revista de la American Association of Retired Persons (AARP The Magazine) en febrero de 2021;
«La vida es un regalo, incluso con la enfermedad de Alzheimer. Gracias a Susan y a mi familia por su apoyo, y a AARP The Magazine por contar mi historia”, escribió el cantante en aquel momento en su cuenta de Twitter.
El Alzheimer no fue un motivo suficientemente pesado para alejarse de los escenarios y fue en agosto de ese mismo año cuando realizó su última aparición pública junto con Lady Gaga en el Radio City Music Hall en un programa llamado One Last Time.
Y esto era algo que se podía esperar de Bennett, quien en alguna ocasión dijo que la gran ambición de su carrera no era tener éxitos, sino crear una carrera con un amplio catálogo de canciones que contaran su propia historia y se conectara con el público.
Su carisma y su particular estilo interpretativo lo llevó, en la década de los 60, a convertirse en uno de los cantantes de la época más queridos y respetados no sólo por el público, sino también por sus colegas artistas quienes reconocían su talento.
«Tony Bennett es el mejor cantante en el negocio. Me emociona cuando lo veo. Me conmueve. Es el cantante que transmite lo que el compositor tiene en mente, y probablemente un poco más”, declaró Frank Sinatra en una entrevista a Life Magazine en 1965.
La vida y la carrera de Bennett, un veterano de la Segunda Guerra Mundial y activista de los derechos civiles, podría proporcionar material para varias películas biográficas, pero de acuerdo con los expertos es probable que su legado más perdurable sea su estilo vocal único que lo convirtió en una superestrella en la década de 1950, sobrevivió al surgimiento del rock n’ roll, el disco, el rap y hasta el reguetón, y eso lo ayudó a disfrutar de un resurgimiento en su carrera, con artistas más jóvenes, durante los últimos 25 años de su vida.
«La forma en que nos deshacemos de la música todo el tiempo, y del arte y las décadas pasadas todo el tiempo, como si estuvieran anticuadas, que ser nostálgico es para geeks, es doloroso. Gran parte de la música que se ha presentado a través del Great American Songbook (cancionero estadunidense), a través de Fred Astaire, se transmite a través de generaciones de hombres y mujeres, y Tony es uno de esos hombres”, dijo Lady Gaga en una entrevista en 2015 para el Chicago Tribune.
A finales de los 60 y principio de los 70, los productores musicales le ofrecían grabar canciones que iban con la tendencia del momento, sin embargo el cantante se mantuvo firme en lo que creía y le gustaba, uniéndose a figuras como Louis Armstrong, Bing Crosby, Judy Garland, Billie Holiday y Frank Sinatra.
«Quería cantar las grandes canciones, canciones que sentía que realmente le importaban a la gente”, dijo Bennett en The Good Life, una autobiografía escrita con Will Friedwald en 1998.
Anthony Dominick Benedetto nació el 3 de agosto de 1926 en Long Island, Nueva York y creció en la pobreza en el distrito de Queens. Su padre, John, era un inmigrante italiano que se ganaba la vida como tendero, pero después de un período de mala salud, murió cuando Tony tenía 10 años.
Bennett creía que su talento era heredado y que la temprana muerte de su padre lo empujó a tener éxito.
«La leyenda en mi familia era que mi padre solía pararse en la cima de una montaña y todo el valle lo escuchaba cantar. Esa es la razón por la que estoy cantando”, explicó en algún momento. Su madre, Anna, alentó su amor por la música. Trabajaba muchas horas entre semana como costurera pero, los domingos, organizaba conciertos familiares protagonizados por sus hijos. Bennett fue el hombre de mayor edad en tener un álbum número uno en los Estados Unidos; en una carrera de siete décadas vendió más de 50 millones de discos en todo el mundo. Ganó dos premios Emmy y 20 premios Grammy.
Trabajó a lado de personajes como Aretha Franklin, Frank Sinatra, Barbra Streisand, Paul McCartney, Elton John y Amy Winehouse.







