‘Un tranvía llamado deseo’, una obra sobre el machismo y la codependencia
La actriz y asistente de dirección Patricia Vaca está orgullosa de comprobar, gracias a la aceptación que está teniendo el montaje Un tranvía llamado deseo, que sí se puede hacer teatro, y considera que es algo que da alegría y orgullo al teatro mexicano en general.
El montaje protagonizado por Marina de Tavira , Rodrigo Virago, Diego Medel y Patricia Vaca, entre otros, ofrece funciones actualmente en el Centro Cultural del Bosque como parte de una temporada que ya se encuentra totalmente agotada.
“Lo que queremos como artistas es contar historias, llevar esta historia y provocar lo que sea que le provoque al público pero al final lo que quieres es que haya más gente para que a más gente le llegue el mensaje, la historia y estamos muy agradecidos de estar en ese teatro, tener el apoyo del Inbal”, dice en entrevista.}
Con respecto a la adaptación que hizo el director Diego del Río del texto clásico de Tenesse Williams, Patricia destaca también el apoyo que recibieron a través de un estímulo fiscal para así poder levantar la obra:
“No pasa tan seguido (tener una temporada llena); obviamente como productor lo que más deseas es que tu obra se venda, sea rentable, que vengan más temporadas. Es bastante difícil en cualquier tipo de presupuesto de obra, y lo que está padre es que como se hizo con un estímulo de Efiartes (Estímulo Fiscal a Proyectos de Inversión en la Producción Nacional de Artes Visuales) es accesible a todo el público.
La obra, que retrata temas como el machismo y la codependencia, sigue a Blanche DuBois (De Tavira) quién llega a Nueva Orleans para vivir con su hermana Stella y su cuñado Stanley, enfrentando traumas pasados y condiciones de salud mental. En la historia, Vaca interpreta una fusión de tres personajes que, según explica, corresponden a la mexicana vendedora de flores, la vecina y la enfermera, del texto original.
“Es un personaje que augura todo lo que va a pasar y esta explosión que va a haber con Blanch”, detalla.