Triunfa cinta stop-motion en Festival de Cine de Londres
Tras ganar uno de los principales reconocimientos en el Festival Annecy a principios de año, la película de animación australiana Memoir of a Snail brilló ahora en el Festival de Cine de Londres del BFI.
El aclamado largometraje en stop-motion, que ya se erige como una favorita para el Óscar, ganó el premio a la Mejor Película en la competencia oficial del certamen londinense, este fin de semana
«Nuestro jurado se sintió increíblemente conmovido por Memoir of a Snail de Adam Elliot, que es un logro singular en la realización cinematográfica», afirmó el jurado en un comunicado de prensa, según Deadline.»Emocionalmente resonante y constantemente sorprendente, la cinta aborda temas pertinentes como el acoso escolar, la soledad y el duelo, creando un diálogo crucial y universal de una manera que solo la animación puede lograr. El jurado está encantado de reconocer una película animada junto con sus pares de acción real».
El filme, dirigido por de Adam Eliot, nos presenta a Grace Pudel, una niña que vive en Melbourne, Australia, en los años 70, con su hermano gemelo Gilbert. El padre de ambos, Percy, de origen francés, es un ex malabarista parapléjico debido a su alcoholismo.
Para sortear los problemas y desventuras en su vida solitaria, desde la infancia hasta la edad adulta, Grace desarrolla un amor por coleccionar caracoles, que comparte con su madre, quien murió al dar a luz.Memoir of a Snail cuenta con un reparto de voces en inglés integrado por talentos como Sarah Snook, Kodi Smit-McPhee, Eric Bana, Dominique Pinon, Nick Cave y Jacki Weaver, entre otros.Por su parte, On Becoming a Guinea Fowl, de Rungano Nyoni, una tragicomedia que fue un éxito en la pasada edición de Cannes, recibió una mención especial en el festival británico.»Esta es una historia elaborada de manera intrincada y llena de imaginación que se atreve a decir lo indecible sobre un depredador sexual en una comunidad unida de Zambia», señaló el jurado.Mientras tanto, On Falling, de Laura Carreira, se llevó el premio Sutherland en la categoría de Primer Largometraje de Cineastas Debutantes, la primera ganadora británica del premio desde Clio Barnard en 2010.»Se trata de un retrato rico en capas de un mundo gobernado por el afán de lucro corporativo, visto a través de la historia de una mujer inmigrante cuya alienación sentimos profundamente, contada con una precisión cinematográfica magistral y actuaciones discretas y vividas», señaló la cineasta Dionne Edwards, que formó parte del jurado, sobre On Falling.Finalmente, el premio Grierson en la categoría de documentales fue para Mother Vera, de las directoras Cécile Embleton y Alys Tomlinson, sobre una joven monja ortodoxa que debe enfrentarse a su pasado. El premio al mejor cortometraje fue para Vibrations from Gaza, de Rehab Nazzal, sobre la resiliencia de los niños palestinos sordos en Gaza mientras viven con los ataques militares de Israel.