Chilpancingo, México.- En el aniversario del feminicidio de la niña Camila, familiares, amigos y vecinos realizaron una caminata y acudieron a una misa en el Municipio de Taxco.
«(La muerte de Camila) no fue en vano», dijo Margarita Ortega Díaz, mamá de la víctima, en un breve mensaje que dio este jueves luego de la homilía que ofició el sacerdote de la iglesia San Martín, ubicada en el barrio de El Chorrillo, casi en el centro de esa localidad.En el acto luctuoso, que empezó a las 12 del día, participaron más de 100 personas que realizaron una caminata encabezada por doña Margarita. Una niña llevaba la fotografía de Camila.La pequeña, de 8 años, fue secuestrada y asesinada hace un año cuando eran las fechas de la Semana Santa.
«Hoy, a un año de la tragedia, es un momento para seguir haciendo conciencia de la necesidad de hacer un mundo más solidario, donde se reúna la justicia y la paz, pero construirla por cada uno de nosotros, es lo que nos toca hacer», dijo el sacerdote.»El poder de Dios es infinitamente superior, pareciera que el mundo está sumergido en el dolor, el mal ha cantado victoria, ha tenido la delantera ante los acontecimientos violentos que siguen siendo dolorosos, pero el poder de Dios está siempre en primer lugar».Tras concluir la misa, la gente caminó por las calles del barrio de La Florida. El hermano menor de Camila llevaba su fotografía y una niña su muñeco favorito.Muy cerca del lugar de la casa de la víctima colocaron flores y algunas veladoras en un pequeño altar de la Virgen de Guadalupe.Ahí, doña Margarita dio un mensaje en el que dijo que hace un año «su corazón se rompió en mil pedazos».»Cuando mi Camila, mi razón de vivir, fue arrebatada de mis brazos de la manera más cruel e injusta, desde entonces cada amanecer ha sido una batalla y un tormento, y su ausencia un vacío que nunca se llenará», expresó.En los actos fúnebres estuvo el Alcalde de Taxco, Juan Andrés Vega Carranza, quien dio a conocer el programa «Callejones de Paz y la Alarma Camila».Dicho programa consiste en la rehabilitación de los callejones donde caminaba y jugaba la niña, sostuvo.Posteriormente, la gente se trasladó al panteón de Jesús, ubicado en la comunidad de San Francisco Cuadra. En la tumba donde están los restos de Camila se rezó un rosario y colocaron flores.El 27 de marzo de 2024, Camila fue secuestrada y asesinada. La inoperancia de la Fiscalía General del Estado y corporaciones policiacas provocó que la gente reaccionara de manera violenta y se metiera por la fuerza a donde estaban escondidos los responsables, a quienes tundieron a golpes.Ana Rosa Aguilar murió a consecuencia de la golpiza, y sus hijos Juan Alfredo y Axel Estrada Aguilar están presos. Sólo Axel ha sido sentenciado a 5 años de prisión y quedan pendientes de sentencia Juan Alfredo y la pareja de su mamá, el taxista José Ricardo.A un año de la tragedia, la casa donde fueron sacados por la fuerza los agresores luce abandonada. En esta vivienda estuvo secuestrada por varias horas la niña Camila.
