Pemex se asoma al grado de inversión en plena tormenta global

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Ciudad de México.– En medio de un escenario internacional marcado por el cierre de gobierno en Estados Unidos y la volatilidad financiera, Pemex recibió una bocanada de oxígeno. Fitch Ratings elevó su calificación de BB a BB+, lo que coloca a la petrolera a un solo paso de recuperar el grado de inversión perdido.

De acuerdo con el Reporte AM de Actinver, la decisión refuerza la percepción de que el respaldo del gobierno federal y la gestión de deuda han dado resultados en el corto plazo, aunque persisten los retos estructurales de rentabilidad y eficiencia.

Los mercados globales mostraron resiliencia: el S&P 500 y el Nasdaq marcaron nuevos máximos históricos, con futuros al alza de 0.15%. El cierre del gobierno estadounidense, que mantiene suspendida la publicación de cifras de empleo, incrementó la probabilidad de mayor desempleo en los próximos reportes y con ello la expectativa de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal en sus dos reuniones restantes de 2025.

En México, el índice MEXBOL avanzó 0.47% hasta los 62,220 puntos, acumulando un alza de 25.66% en lo que va del año. El tipo de cambio se ubicó en 18.40 pesos por dólar, con una ganancia acumulada de 11.6% del peso en 2025. Según especialistas de Actinver, este nivel de paridad favorece a importadores, pero presiona a exportadores que reciben menos pesos por cada dólar ingresado.

Impacto en Chihuahua y la frontera norte

El repunte crediticio de Pemex también tiene eco en la frontera. De acuerdo con especialistas de Actinver, mejorar la calificación reduce el costo de financiamiento de la petrolera, lo que puede traducirse en mayor estabilidad en la oferta de combustibles para la maquila y el transporte transfronterizo, dos motores clave de Ciudad Juárez y Chihuahua capital.

La expectativa de recortes de tasas de la Fed podría inyectar mayor liquidez global, con beneficios para la industria manufacturera juarense —especialmente en electrónicos y autopartes— que depende directamente del dinamismo de Estados Unidos. No obstante, los analistas advierten que la volatilidad en energéticos sigue siendo el mayor riesgo para la región.