El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla aseguró que se restableció la tranquilidad en la región de Apatzingán, donde presuntas acciones violentas de bandas delictivas recientemente causaron temor entre grupos de habitantes de las comunidades Llano Grande, Tepetate y Las Bateas, quienes se desplazaron a la población de la Presa del Rosario, en cuya parroquia se refugiaron, pero ya regresaron a sus hogares y reanudaron sus labores en esa zona agrícola.
Durante su visita este sábado a Apatzingán, el mandatario estatal encabezó una reunión del Grupo de Inteligencia Operativa (GIO), donde participaron representantes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guardia Nacional, de la Guardia Civil y la Fiscalía General del Estado.
Ramírez Bedolla afirmó que se acordó mantener acciones de vigilancia y seguridad mediante la Base de Operaciones Interinstitucionales (BOI) en Apatzingán y sus alrededores
Asimismo, en su mensaje el gobernador sostuvo que está garantizada la permanencia de efectivos militares y policiales para mantener el orden público de la región.
Subrayó que con la presencia de elementos de la Guardia Civil y Guardia Nacional, así como de las Fuerzas Armadas, ha regresado la confianza de la población al reanudar a sus actividades productivas en varias localidades de la región de Apatzingán.
Alfredo Ramírez Bedolla advirtió que se mantiene firme el compromiso de mantener las mesas de seguridad y coordinación interinstitucional como medida eficaz, para preservar la paz que demandan los habitantes.
En la reunión participaron el secretario de Gobierno, Carlos Torres Piña; el titular de la SSP, Alfredo Ortega Reyes; el fiscal general del estado, Adrián López Solís; el comandante de la XII Región Militar, Enrique Covarrubias; el comandante de la 21 Zona Militar; Fernando Colchado; el comandante de la 43 Zona Militar, Héctor Ávila Cortés, y el coordinador estatal de la Guardia Nacional, Ernesto López, entre otros.
